lunes, 13 de diciembre de 2010

sábado, 4 de diciembre de 2010

BERENGUER

TEATRO BAHIENSE

DRAMATÚRGIA DE BAHÍA BLANCA
TEATRO BREVE EN CAPITAL FEDERAL

Martes 14 y Miércoles 15 de Diciembre 8.30 pm



No habrá más cartas de amor
de Miguel Mendiondo

Actúan: Karla Castillo y Miguel Mendiondo
Asistencia de movimiento: José Gungolo
Vestuario: Nikolás Meliqueo



Las Aventuras de Gran Conejo
de Gonzalo San Millán

Actúan: Rocío Vega, Guillermo Rodriguez y Gonzalo San Millán
Iluminación: Hernán Lucich




Ciclo de danza "CASA COMPARTIDA"

Dos obras integradas en un ambiente


Domingos 5 y 12 de Diciembre 7.30 pm


     


      DOMÉSTICA
         (Trabajo en proceso)













Intérpretes: Laura Stivelman, Lucrecia Pierpaoli, Teli Ortiz
Coreografía y dirección: Grupo Pleimovil
Asistencia general: Ollantay Rojas
Vestuario: Constanza Pierpaoli
Iluminación: Eduardo Spíndola
Diseño gráfico: Lucía Molina y Vedia
Video: Pablo Gorostiaga

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      HÁBITO DE CHICA

La obra propone un viaje corporal a la Argentina de los años `40 y `50. Las intérpretes y su acompañante se sumergen en el mundo de lo femenino; sus recuerdos y sus múltiples recovecos (límites explícitos, represiones gestuales y la necesidad de abordar liberaciones aún en ciernes). Se trata de una época histórica particular que el proyecto asume como campo de exploración estético, inspirado en mujeres surgidas de textos de Manuel Puig (Boquitas pintadas) y Silvina Ocampo (El vestido verde aceituna).


Intérpretes, coreografía y dirección: Paz Ladrón de Guevara, Virginia Ravenna, Angel Porro
Asistencia técnica: Anabela Cruz
Asesoramiento artístico: Lorena Ponce
Diseño de luces: Soledad Ianni
Diseño sonoro: Andrés Drimer
Diseño gráfico: Francisco Ladrón de Guevara









miércoles, 1 de diciembre de 2010

SEMANA ESCENA DOSMILDIEZ



Si en la actualidad, Buenos Aires es una de las capitales culturales más importantes del mundo, se debe en gran medida a todo lo que generan su teatro y su danza independientes.Y para potenciar esta marca distintiva, el gobierno no debería cerrar espacios sino, por el contrario, ayudar a su creación y preservación. Esta es su obligación constitucional y que se cumpla con ella es uno de los objetivos principales de ESCENA.



PROGRAMACIÓN

-BONO CONTRIBUCIÓN $5-

30 de Nov
21 hs / Climatique et solitude de Nahuel Cano / CCMatienzo

1 de Dic
21 hs / Venganza de Diego Mauriño / Teatro del Perro
20.30 hs / Jugar con Fuego (Strindberg) dir. Mónica Benávidez/ Querida Elena sencillas artes

2 de Dic
22 hs / Plagamante de Rubén Sabadini/ Vera Vera Teatro
16 y 18 hs / Áspero de Santiago Gobernori/ Club de teatro Defensores de Bravard
21 hs / Sencilla de Santiago Loza y Lisandro Rodriguez/ Elefante Club de Teatro

3 de Dic
21 hs / Al otro lado de la vereda de Milton Lopezarrubla/ Abrancancha

4 de Dic
23.30 hs / Ensayo 01-2.0 de Marcela Fraiman/ El Crisol
20.30 hs / La Maciel, de todas la más cruel de Béla Arnau/ El pacha
23 hs / Asco de Santiago Loza y Lisandro Rodríguez/ Elefante Club de Teatro
22 hs / Prima Donna de Diego Echegoyen/ C.C. Matienzo
22.30 hs / Teatro cortito... la fiesta inolvidable/ El pacha
21 y 23 hs / Ph, un lugar común de Claudio Mattos/ Espacio Polonia
23 hs / Doppelgänger de Matias Feldman y Santiago Gobernori/ Club de teatro Defensores de Bravard
21 hs / Temporal de Anibal Gulluni/ Vera Vera Teatro

5 de Dic
20 hs / Susana de Lorenzo Anzoátegui/ C.C. Matienzo
18 hs / Jugar con Fuego ( Strindberg) dir. Mónica Benávidez/ Querida Elena sencillas artes
20 hs / El legado de Caín de Claudio Quinteros/ El brío
19 hs / Hugo de Felix Torre/ Ladran Sancho
20.30 hs / París en América de Paula Herrera / Tomás de las Heras- GRANATE

6 de Dic
21 hs / Cada una de las cosas iguales de Alberto Ajaka/ Escalada
19 hs / Jugar con Fuego ( Strindberg) dir. Mónica Benávidez/ Querida Elena sencillas artes 

7 de Dic
ACTIVIDAD ESPECIAL
Mesa Abierta de Escena
martes 7 de diciembre 16hs
Teatro del perro
Bonpland al 800
acreditaciones 
teatrodelperro@gmail.com

20.30 hs / Quiero Celeste de Amaray Collet/ Vera Vera Teatro 
20.30 hs / Medianoche de Malena Rago/ Vera Vera Teatro

8 de Dic
21 hs / La vida terrenal de Santiago Loza y Lisandro Rodriguez/ Elefante Club de Teatro



Más información: 
organizacionescena@gmail.c
om






martes, 30 de noviembre de 2010

EN TRES

Sábados 4 y 11
   Diciembre
     8.30 pm






















































Interpretación y composición  coreográfica: Magalí Canosa, Vanina Santicchia, Roberto Ariel Tamburrini / Asistencia de Dirección: Georgina Forconesi / Asistencia Artística: Analia Barbieri /
Diseño de Iluminación:  Eduardo Spindola / Diseño y producción de Vestuario: Jimena Del Hierro / 
Diseño gráfico: Sergio Calvo / Fotografía: Hernán Mazzanti / Colaboraciones: Mariana Carli, Norberto Massimillia, Carol Del Castillo / Idea y Dirección: Roberto Ariel Tamburrini





miércoles, 10 de noviembre de 2010

FABULANDIA

    Viernes 26 
   de Noviembre


Viernes 3, 10 y 17 
   de Diciembre


      9.45 pm




Una casa; lugares secretos y escondidos, recovecos de los patios y jardines: un espacio escénico.
Antiguas músicas cotidianas devuelven a la experiencia propia.
A lo largo del trayecto, el espacio invita y aleja, 
las puertas se abren.
Festejo del baile. Celebración de los cuerpos.

BAILARINES: Natalia Bianchi, Marina Kenny, Andrea Manso Hoffman, Ivana Smoljanovich, Nicolás Baroni, David Chartoriski, Gustavo Díaz, Andrés Sosa  
ASISTENTE DE DIRECCIÓN: Andrea Benassi 
COREOGRAFÍAS: Teli Ortiz, Andrea Castelli y elenco
COLABORACIÓN COREOGRÁFICA: Agnese Vanaga
ASESORAMIENTO SWING: Mariela Furh y Gabriel Cavallini 
DISEÑO Y OPERACIÓN DE LUCES: Eduardo Spindola
OPERACIÓN DE SONIDO: Sergio Bazán
VESTUARIO: Bacana Tango 
FOTOGRAFÍA: Angie Gonzalez
DISEÑO GRÁFICO: palomaunave.com 
DIRECCIÓN: Andrea Castelli



























Querida Elena es para Fabulandia  todo el espacio. 
Porque Fabulandia es, en principio una propuesta en la que se realiza un recorrido. La primera parada no es del orden de la ficción: una invitación a honrar a Baco antes de comenzar. Allí entregan el programa de mano y un pequeño plano para ubicarnos en el espacio a recorrer.
La primera habitación nos recibe con dos hombres y dos ¿asientos? Pero esos asientos son móviles, tienen vida propia, se rebelan contra los sentados. La primera imagen podrá causar urticaria a las defensoras del género, los hombres, vestidos, se acomodan sobre los cuerpos de las mujeres, en enaguas, sin embargo, prontamente la relación se invierte y lo que se presupone un acto de sometimiento, desaparece para convertirse en algo de otro orden.
Es necesario hacer una aclaración en este momento, éste es un espectáculo que llevan adelante “bailarines de tango”, la música que constituirá las escenas (porque no las “acompaña”, las constituye) pertenece a este género, ésta es la base, el punto de partida, lo demás es Fabulandia.
La próxima instancia está duplicada, hombres y mujeres se separan y cada grupo ocupa una habitación diferente. Y de más está decir que es imposible para nosotros la ubicuidad, por lo que quien vea una cosa se perderá la otra. ¿No es un buen motivo (entendido como unidad del tema) para reflexionar sobre el lugar del que observa? De manera explícita, con firmeza, nos indican, que ver algo implica no ver otra cosa.
Cuando el grupo de espectadores vuelva a unificarse (también esto es muy interesante porque la diseminación de bailarines conlleva una diseminación de espectadores, y el espacio que es en principio uno, es sólo relativamente, uno), se pondrá en juego un recurso muy particular. La intención es plantear parcialmente el mecanismo (para no quitarle la gracia a los futuros asistentes): los que actúan-bailan, aparecen enmarcados luz y cortina mediante, tal como se enmarcarían en una pantalla, están ahí, podemos percibirlos en copresencia, y sin embargo, están absolutamente inaccesibles, entonces se vive la presencia y la distancia obligada, en simultáneo.
Pero hay más, elegiremos una última mención a la parte del recorrido: el baile en la escalera.
Todos sabemos que las escaleras son para subir y bajar, o en su instancia artística y simbólica para bajar armoniosamente desde un no lugar a un escenario... esta escalera está lejos de connotar lujo, por otra parte es angosta, lo que dificulta el movimiento de dos sujetos a la vez.
Sin embargo, bailan, el espacio en el que lo hacen no está ocultado o disimulado sino registrado con todo el cuerpo, no solo hay un modo de poner los pies, sino también de mirar, ellos perciben el espacio en el que se mueven, entonces el espectador duplica la percepción de ese espacio, por un lado porque, es evidente, lo ve en términos materiales, pero además observa los desplazamientos de los bailarines que subrayan, asimismo, las características de la superficie en la que se asientan y que además provoca el vértigo del riesgo.
Todo esto descripto, y mucho más, es parte del avance por Querida Elena hacia el fondo, la sala “más tradicional”, que incluso tiene sillas para acomodarse. Entonces lo visto se resignifica, desde el vestuario, a medias, incompleto, hasta los pasos que nos permitieron progresar en orden hacia el espectáculo final.
Allí aparecerán completando el vestuario, arreglándose para la “fiesta” que implica bailar, y allí habrá algo de baile más clásico, absolutamente impecable, acompañado por propuestas que pertenecen a otros universos kinéticos, con una concepción lúdica del movimiento que preside todo el planteo espectacular.
Fabulandia es una joyita que tiene un plus, acercar al tango a los legos, y mostrar a los expertos cómo siempre se puede imaginar algo más allá.

Mónica Berman /  
http://www.criticateatral.com.ar



La maravilla de la danza contando una historia de tiempos idos. Melodías  que se escucharían en los patios de las casas en los años 50 o 60. Fabulandia  remite, para los buscadores de las antigüedades en San Telmo, a la colección de fábulas de Codex y se parece a las fábulas en que los humanos no hablan si no es desde los discos.
“Querida Elena” es una casa antigua de las que rodean Parque Lezama que no está restaurada sino conservada valorando parte de su pasado. En las habitaciones de esta casa podemos caminar entre una historia que se desarrolla con paso de baile y con una maravillosa coreografía adaptada al lugar que es inspirador pero también es un reto. Cuestiones como poner a las bailarinas de espaldas en el segundo cuadro, cuando todavía hay necesidad de acomodarse son signos de inteligencia y creatividad. Pasean por todas las posibilidades coreográficas sin deformar la imagen de la época.

Excelentes bailarines manejándose en espacios muchas veces pequeños, con una destreza nada forzada, como si los movimientos nacieran en ese mismo instante.
La caricatura del  tanguero se borra al no existir la palabra. Esto en lugar de actualizar la mirada convierte el recorrido en una especie de viaje en el tiempo. Imágenes del pasado no estereotipadas que lucen auténticas.
Es una experiencia para los sentidos, toda la casa aromatizada con incienso de excelente calidad y en una habitación unos habanos apagados cuyo aroma inunda un par de escenas.
El vestuario es bellísimo y muy  sensual Enaguas, vestidos vaporosos, encajes, colores blancos  reflejan la luz dirigida. El último cambio de ropa de las chicas incluye unos apliques en el pelo diferentes para cada una, divinos.
Sensualidad y tango en un envase excelente. 


La primera imagen que tenemos del espectáculo es la de dos hombres “sentados” sobre las espaldas de dos mujeres. Los varones están vestidos formalmente, pantalón de vestir, camisa blanca, las mujeres en enagua. Los varones se mueven, se buscan, se retan; las mujeres acompañan contorsionándose según los movi-mientos de ellos. En un momento el cuadro se metamorfosea en un ejercicio de Contact.


Pero no empezamos por el principio. El principio es Querida Elena en su totalidad, que parece haber sido un conventillo en otros tiempos. Fabulandia se apropiará de todos los espacios que están a la vista. La obra se desplazará (nada más apropiado, ahora que lo pienso, para una obra de danza) a lo largo de las habitaciones, patios, escaleras del lugar.


En la primera habitación se pudo apreciar la escena ya contada, en la segunda y tercera habitación se desarrollaron dos escenas, una con cuatro mujeres y otra con cuatro varones, en forma simultánea. El espectador debía elegir o alternar, ya que había pocos espacios desde donde apreciar ambas a la vez. El espectador tienen un papel activo, “arma” su propia obra. En estas escenas, se preparan para el baile, para la fiesta, para el tango. El recorrido sigue en otra habitación que vemos en forma parcial, con un espacio vacío de por medio, una especie de fosa que separa al público itinerante y a los bailarines. Y luego también hay bailarines en la fosa, aprovechan la geografía acotada de unos pocos metros, como también sucede unos pasos más adelante, en unas escaleras de material, angostas, gastadas, donde otros dos bailarines despliegan talento y desafían las leyes de la gravedad con algunos pasos y quebradas que están al límite. En ambas situaciones, además de la calidad de los bailarines, se aprecia el trabajo de coreografía y dirección de Fabulandia, un placer visual.


Finalmente, previo baile en un patio interior, ingresamos a una sala con asientos y escenario, una propuesta final más tradicional. En ese espacio se cruzan todas las historias y parejas que vimos antes. Difícil hablar de si se destaca algún bailarín más que otro, dado que todos tuvieron su momento para lucirse y todos lo hicieron bien. Las coreografías están impecablemente articuladas, así como también las situaciones narradas con los cuerpos, los pasos de baile, las miradas.


Para redondear esta experiencia, vale destacar que el audio de los tangos que acompañan las escenas suenan más que apropiados para lo que vemos y lo que sentimos en Querida Elena; donde baile, espacio y música nos transportan a un mundo que pasó hace décadas, pero que en ese momento sentimos próximo y real.






STRINDBERG




Sábados y Domingos Noviembre
6.30 pm

Segunda temporada







¿Se puede renovar el deseo?
¿Puede alguien hacerlo circular perversamente entre nosotros?
Como un juego que ayude a aliviar aunque sea un instante, el hastío existencial. El erotismo como instancia para encontrarse, como pulsión vital que nos rescate de la abulia, de lo cotidiano, de nuestra propia indiferencia...
Pero es un juego y tiene reglas, comienza y termina, el que no las comprende no avanza, se queda fuera o puede terminar herido.


Vestuario Nora Cervantes
Música Original Mauricio Motille / Gèrard Clèment
Colaboración musical Romina Grosso
Escenografía Eduardo Spindola
Asesoramiento María Mensi
Producción general grupo mirando al sur
Asistencia de dirección Javier Ahumada
Dirección Mónica Benavidez .

viernes, 17 de septiembre de 2010

GALAXIA BOLAÑO






ESTRENO
   Domingo 26/9    
8.30pm













 
Actúan:  Fernando Iglesias - Diego Santos - Camila Casalet - Fiona Gollob

Escenografía y vestuario:  Paula Franzi
Iluminación:  Eduardo Spíndola
Asistente de dirección:  Ramiro Masseilot
Dramaturgia y puesta en escena:  Alberto Casalet




miércoles, 1 de septiembre de 2010

ROSA BRILLANDO

ROSA brillando
una invocación a la poética de
MAROSA di giorgio


Intérprete: vanesa maja
Músico en escena/ música original: gonzalo gamallo
Producción: ximena hoffmann
Dramaturgia: vanesa maja y juan parodi
Dirección General: juan parodi


Una diminuta ceremonia poética para
25 personas, acontecida en una antigua casona ubicada a 2 cuadras del Parque Lezama, en donde cobrarán vida las historias de la gran autora uruguaya: la fuerza de la naturaleza...el influjo de lo sobrenatural... lo exótico... lo erótico...
Un encuentro entre la poesía, el teatro y la música.

La celebración será amenizada por tés y otras delicias

SÁBADOS 17hs

martes, 31 de agosto de 2010

KÖPFMASCHINE





ESTRENO JUEVES 2 - 9 pm










Köpfmaschine es el mecanismo del enamoramiento, un bucle sin salida, la pausa antes de perder la cabeza. Köpfmaschine es una máquina que produce caídas, una máquina del deseo que produce constantemente la destrucción de lo que se desea. Köpfmaschine es una mujer bailando descalza sobre la sangre del hombre que ha deseado y ha matado.
O lo que es lo mismo, Köpfmaschine es un trabajo coreográfico contemporáneo que surge de una búsqueda colectiva sobre el Salomé de Oscar Wilde y el concepto de máquina de Gilles Deleuze en su influyente texto filosófico Anti-Oedipus. Combinando elementos de la danza contemporánea, el teatro físico y el teatro de objetos, esta pieza trabaja sobre la deconstrucción de las estructuras literarias y las imágenes de la tragedia de Wilde, para poder reconstruirlas en una sorprendente coreografía de cuerpos y objetos atrapados en un eterno mecanismo del deseo.

Intérpretes:Lucia Disalvo, Atilio Schweizer, Lidia Cangiano, Victor Mora
Diseño y operación de iluminacion: Eduardo Spindola
Diseño y realización de vestuario: Daniela Torta
Diseño de escenario: Eduardo Spindola
Dramaturgia y puesta en escena: Herman Pasullero, Lidia Cangiano
Coreografía: Herman Pasullero con la colaboración de los intérpretes
Dirección: Herman Pasullero



viernes, 30 de julio de 2010

lunes, 28 de junio de 2010

Marina Luppi Folklore












Gracias a los creadores, poetas y músicos que han construído, y lo hacen cada día, un camino de canciones. Canciones que nos incluyen y nos convocan.

Sábado 3 de Julio 8 pm



miércoles, 9 de junio de 2010

miércoles, 12 de mayo de 2010

SOCAVÓN















Viernes 9 pm.









TIERRA ADENTRO - TEMPORADA 2











Dijo la crítica…
“Tierra Adentro se anima con algo poco usual en el potpurrí de la danza contemporánea local: la temática de lo que podríamos llamar la vida "real" en las provincias argentinas (…) Y toca estos tópicos sin alardes de ‘melancolismos’ vacuos, ni de estereotipos repetidos hasta el cansancio, que postulen personajes canónicos, y mucho menos tiñendo de "universalidad" (un eufemismo que esconde un ademán europeizante de muchos de los coreógrafos locales) las escenas pequeñas pero contundentes de la obra”
Alejandra Cosín, Alternativa Teatral
http://www.alternativateatral.com/


“Con potente y expresivo lirismo, particularmente construido en los detalles y las sutilezas del gesto y su estilización, Soibelzohn y Ayala dejaron con Tierra Adentro huellas de identidad que, aunque privadas e íntimas en primera lectura, constituyen atajos de comunicación con los propios trazos identitarios de cada espectador.”
Román Ghilotti, Balletin Dance




“Luz de penumbra. Dos mujeres, un mismo universo: el de los recuerdos que se tejen y destejen durante la vida. El hilado es parte de una escenografía viva que se construye en cada función. Una obra calma, amena y muy sensorial.”
Paula Picarel, revista cultural BA Voice






Interpretación y dirección Eva Soibelzohn y Paola Ayala /Diseño y realización de Arte Eduardo Spíndola /Asesoramiento estético y diseño de vestuario Rocío Campos /Diseño, realización y operación técnica Eduardo Spíndola /Realización de banda sonora Gustavo Testa /Música Lerner-Moguilevsky dúo y Chango Spasiuk /Fotografía Silvana Miyashiki /Realización de video Verónica Enciso y Juan Ojuez /Comunicación y diseño Dinah Schonhaut y Ramiro Sáenz /Asistencia General Florencia Bié /Prensa Quilombo!










Tierra Adentro (una metáfora de la memoria)
Sábados 9 pm







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TEATRE AL SALÓ-CUINA - REVISTA HAMLET























TERCERA TEMPORADA ÁSPERA





JUEVES DE ABRIL 9.30 pm









Dijo la crítica:

LAS12 DANZA Como en casa
Un espectáculo de danza que se desarrolla en los ambientes de una casona de La Boca consigue una interesante armonía entre público y bailarinas.
Hay quienes se consideran miembros de una generación transitoria, que no es la de los comprometidos luchadores de los ’70 o la de los leves noventosos. La generación cuya marca de existencia es el tránsito perpetuo, el perpetuo presente; la generación que dejó de concebir el porvenir.
Aspera y sensible, de la compañía No Se Llama, recoge con precisión este paradigma. Los intérpretes nos depositan casi sin darnos cuenta en su liquidez, en su fluencia perpetua.
Por empezar, el emplazamiento de la pieza impone una reubicación forzosa, por un lado, y un recorrido por otro. Un teatro que no es un teatro sino una casa, completamente equipada como casa, que podría servir como casa, pero que no se usa como tal. Y que con una reminiscencia muy explícita a aquella Tamara (Lempicka) de los ’90 en la mansión de San Telmo se lleva puesta a la audiencia de acá para allá recorriéndola. Que además es fascinante y hermosa, llena de rincones viejos, plantas añosas, sabiamente restaurada, recompuesta.
Se abre el juego con la invitación a un vinito, que será repuesto tanto como se quiera. Enseguida, con sonido de fonola, se escuchan estándares de Glenn Miller o Henry Mancini, y en un cuarto muy cercano a la puerta de acceso se enciende la luz y unas mujeres como salidas de las obras completas de Silvina Ocampo comienzan indolentes sus desarrollos en un living; parece que esperan, vaya uno a saber qué. Juegan con una radio y sus sonidos, por turno, cada quien hace su ostinato o su vals. Hermoso homenaje a la querida Pina.
Las intérpretes no tienen ni el gesto ni el cuerpo de las bailarinas. A esta altura de la danza en Buenos Aires, no es suficiente con esquivar el gesto relamido o la destreza formal para esquivar el formato. Hay algo relacionado con la manera de estar, de pararse, de mirar, de no estirar el cuello, de cómo llevar la ropa. Cinco chicas que pueden pasar rápidamente del vestido estampado de fibrana con cuello marinero del comienzo a los jeans y borceguíes del momento en que nos llenan de vértigo sobrevolando un sótano en ruinas y lleno de andamios en el centro de la casa. Y entre cambio de ropa y dinámica sucede el cambio de ámbito: donde se terminó la acción, se apagó la luz y se encendió otro sitio, que puede ser lindero o en la otra punta de la casa. Nunca se sabe qué es primero: la acción o el ámbito. Impresionante. E interesante que dependa de la reacción de la audiencia. Por momentos todos vamos obedientes. Otras veces nadie se mueve y la pieza se detiene.
Un sexto personaje-sujeto, encapuchado y en bermudas, resulta una mezcla de Williams y Severino de El nombre de la rosa. Con claves sonoras varias, como botellas sumergidas en agua y percutidas, inusitadas marimbas de mesa, silla o cemento o cencerros resultantes de aporrear las esculturas de hierro distribuidas negligentemente por la casa, también es orientador de dónde va a continuar la escena.
Una vez más, la casa se impone; parece ser quien desovilla la pieza. No ocurre nada y sucede de todo. No hay episodios que contar, pero uno se va lleno de imágenes. Se pueden narrar muchas secciones, pero es imposible determinar de qué va la pieza. Un excelente ejemplar de la estética líquida contemporánea, como se dijo al principio. Súper recomendable. ¤ Por Pacha Brandolino

"Una puesta que nace de la improvisación en espacios no convencionales y de la ruptura con la pasividad del espectador. Genialidad en acción.La musicalidad de la casa y la del propio cuerpo se entraman con los diferentes lenguajes del movimiento que explora la obra y donde la expresión corporal pisa fuerte. La propuesta creada por el grupo No se llama, se nutre de la relación que los bailarines establecen con la arquitectura de los varios ambientes interiores y exteriores de la casa, en una investigación perceptiva profunda que busca aprehender las texturas, los objetos y la carga simbólica que emana de cada lugar...Vayan y...¡play the game!"Paula Picarel. Revista Bavoice..
"La casa es el primer universo de la cotidianeidad, pero se proyecta como un auténtico “microcosmos”: una unidad de imagen y recuerdo, en la que los espectadores vamos eligiendo por donde ir y que mirar. Los cuerpos moviéndose en las posibilidades múltiples que este espacio alberga, e invitándonos a viajar por los cimientos y secretos de un espacio íntimo y plagado de historias. Muy recomendable. "Mavi Rivera. Reseñas de cine y vida"
http://resenasdecineyvida.blogspot.com/2009/11/aspera-y-sensible.html


“Este abanico reunió situaciones y alusiones con distintos envíos y referencias. Danza callejera con la utilización de paredes, prostitutas amables recibiendo a los que llegaban, obreras en actitudes hieráticas, equilibristas en ámbitos inesperados y otros vestigios de personajes, sin clausuras temáticas ni narrativas, junto con momentos más puramente kinéticos, se entrelazaban con la música (Daniel Figueroa), un actuante más, con cruces grabados y en vivo. También lo lumínico, generado con dispositivos simples (linternas, faroles, veladores), como algunos cambios de imagen y vestuario, hicieron de la creación del Grupo No Se Llama un diálogo abierto con el público.Entre las asperezas de un relato hecho de fragmentos y adaptaciones a las circunstancias, la sensibilidad con la que se vertieron y fueron recibidos los momentos y las posibilidades a que daban lugar, es lo que dejó Áspera y Sensible como tejido interpretativo de performers y público.”
De los posibles tratos. Por Román Ghilotti Revista Balletin Dance


“La casa es maravillosa, se esas con recovecos inauditos y jardines. Y las coreógrafas logran allí que su obra sea una de las mas inquietantes de las que me haya tocado vivir en la vida. Con música de Daniel Figueroa, luces de Eduardo Spindola, y asistidas por Ramiro Bailiarini, increíbles y airosas vuelan estas ninfas suburbanas.”
Revista RSVP

"Ellas se moverán, caminarán, bailarán, saltarán y hasta reptarán al compás de cada son, a veces con impensadas coreografías, a veces con el solo movimiento de sus gestos o miradas esquivas. La casa mostrará hasta los cimientos, en donde se sumergirán quizás en busca de sus orígenes. El único hombre del elenco incorporará su imaginativa e infinita percusión, armónica o disonante, a los ritmos reinantes. Hasta sus pies se humedecerán en un estanque en donde jugará con sonidos de botellas, a las que llenará de agua, vaciará parcial o totalmente, y volverá a blandir un elemento que, golpeando el vidrio, producirá inverosímiles notas. La creativa iluminación, que utiliza desde lámparas convencionales hasta rojas balizas de emergencia, jamás mostrará todo. Esa es la gracia. Será casi en el momento final donde la blanca luz aparezca en la última de las salas, pues al compás de movimientos de pies y chasquidos de dedos, hasta algunos espectadores acompañarán la inusitada propuesta, poniendo de si la energía para terminar de conformar la mágica unión entre seres que, con el arte de la danza como bandera, brindan una muy llamativa puesta en escena que vale la pena experimentar.”
Aspera y Sensible, inusitada representación. Por Martin Wullich
http://www.news.martinwullich.com/vernota.php?id=704&highlight=asperaysensible

Coreógrafas/interpretes
Ximena Ayerbe
Mariana Carli
Guadalupe Seregni
Luciana Seregni
Luciana Spadafora

Música en vivo y diseño sonoro / Daniel Figueroa
Diseño de iluminación / Eduardo Spindola
Fotografía / Florencia Bié
Asistencia general / Anita Ardohain
Producción y diseño de vestuario / Nsll
Prensa / Simkin y Franco
Dirección general / Nsll


Esta obra cuenta con el apoyo de PRODANZA
y con el auspicio del Departamento de Artes del Movimiento IUNA




martes, 11 de mayo de 2010

JUGAR CON FUEGO - STRINDBERG













"Acá la gente come, duerme y espera la hora de su muerte…Ningún objetivo en la vida, ninguna ambición, ninguna pasión”
















Galo Ontivero El Hijo Natalia Fernández Acquier La Mujer Federico Schneider El Amigo Tatiana Santana La Prima Marta Cosentino La Madre Luis Alberto Rego El Padre Vestuario Nora Cervantes Música Original Mauricio Motille / Gèrard Clèment Colaboración musical Romina Grosso Escenografía Eduardo Spindola Asesoramiento María Mensi Producción general grupo mirando al sur Asistencia de dirección Laura Piersanti Dirección Mónica Benavidez .


Agradecimientos Luciano Suardi - Querida Elena.




Alfred Hopkins Buenos Aires Jaque Press
Galo Ontivero, el hijo, fuma lánguidamente y contempla su vaso de whisky en el patio, mientras los invitados más jóvenes se colocan sobre almohadas en las escaleras y los mayores se acomodan en sillas. Un gato negro, sensual y mimoso pasea entre las piernas. Son las 18 horas en “Querida Elena sencillas artes,” la Boca Dulce, Buenos Aires, Argentina. August Strindberg, el dramaturgo sueco y autor del espectáculo no está pero lo podemos imaginar recostado sobre la pared del patio,observando con placer el estreno de “Jugar con Fuego” ajustadamente dirigida por Mónica Benavidez. La meditación densa del hombre se interrumpe con la aparición de Natalia Fernández Acquier, la mujer, los dos vestidos en blanco pero oscurecidos por el tormento de un torbellino de emociones que perturban zonas ocultas de sus almas. Vale una frase para situar el eje de este juego dramático: “Acá la gente come, duerme y espera la hora de su muerte…Ningún objetivo en la vida, ninguna ambición, ninguna pasión.”
Y sin embargo, de pasión se trata. Y de celos. De turbulencias apenas contenidas, luchas encarnadas alrededor de los deseos, el deseo de amar y ser amado con pasión, la intimidación del otro y el miedo a la traición, el engaño…En el mundo de Strindberg los seres pocas veces se muestran contentos, más bien se unen en el afán de encontrar en la pasión una salida a una vida pálida y sin objetivo a la vista.
Siempre aparece en el horizonte un agente perturbador. El amigo, Federico Schneider, divorciado pero cultivando un amor suprimido por la mujer de su amigo, la prima, Tatiana Santana, tierna insinuación fatal, en compañía del padre, Luís Alberto Rego…Más que el argumento, lo que importa en esta versión de Mónica Benavidez es el clima, los burbujos pasionales que explotan y vuelven a formarse, como las nubes, como las tempestades.
Hay una zona en Strindberg que deja de lado el realismo de su época para adentrarse en una estética que habita la frontera con otra región dominada por la pasión y el frío análisis de mar subterráneo en el cual los seres humanos luchan para encontrar sentido a su existencia. La directora ha sabido captar meticulosamente este mundo del dramaturgo sueco, colocando la puesta en un patio interior de una hermosa casa antigua.
Hay pocos lugares como Querida Elena tan aptos para representar a las obras de Strindberg; pocos lugares dedicados a explorar la actuación en franca confrontación con el público, sin luces, sin efectos escénicos, con el sudor del actor viviendo su personaje a dos metros de los espectadores.